Papas antiguas

Un legado transmitido de generación en generación

 

¿Sabes qué son las papas?

La papa soy yo, un tubérculo procedente de América y que tiene muchísimos años de antigüedad. Aquí me llaman papa pero en otros lugares me dicen patata.
La presencia de papas en Canarias aparece en la 2ª mitad del siglo XVI, vinculadas con el comercio y las importaciones que llegaban al archipiélago.

En Los Realejos celebramos 400 años sembrándolas

La papa,
protagonista en nuestra gastronomía

Según el historiador José de Viera y Clavijo, las primeras papas que se plantaron en Canarias fue en Icod el Alto (Los Realejos) en 1622, en las tierras de Juan Bautista de Castro Navarro quien las había traído desde Perú.
Hay en Canarias más de veinticinco variedades de papas antiguas, que hoy se encuentran protegidas por una Denominación de Origen y sellos de calidad. En Icod el Alto se siguen sembrando después de cuatro siglos, gracias a los agricultores que han conservado las semillas, el ciclo de la siembra, los cuidados, el tipo de suelo y la altitud.
Aunque en un principio la papa fue una curiosidad botánica en Europa, con el paso del tiempo se convierte en un producto importantísimo dentro de la alimentación de los pueblos europeos.

Su valor nutricional y gastronómico ha sido ampliamente apreciado por el ámbito culinario.

El valor de lo nuestro

Su valor nutricional

Las papas contienen micronutrientes como la vitamina B6, el potasio, el folato y aparte fibra, igualmente contienen un alto contenido en almidón resistente. Por ello, tienen contenido bajo en proteínas, más bajo en grasas, y alta en carbohidratos.
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